¿Qué cambia cuando estás pensando o preparándote para tener un bebé?
Cuando una pareja toma la decisión de que es tiempo para crecer a su familia, se embarcan en una importante transición de la vida. Si son capaces de concebir rápida y fácilmente, ¡es un momento de celebración! Pero para muchas parejas, el proceso de concebir está lleno de afrentas, recaídas, desilusiones y, a veces, pérdida. Muchas cosas pueden cambiar, incluyendo tu relación con tu pareja, tu vida sexual, tu dieta, tu vida social, y más.
Cambios emocionales
Se ofrece mucha información sobre los aspectos físicos de tratar de concebir, pero no tanta información sobre las emociones que podríamos tener durante este proceso. No es raro que las mujeres sientan las siguientes emociones mientras que intentan concebir:
Emocionada
Felicidad
Tristeza
Desilusión
Cambios en humor
Agobiada
Dificultad para concentrarte
Falta de interés en las cosas que antes disfrutaba
Cambios de sueño y alimentación
Ansiedad
Culpa o insuficiencia
Sintiendo que tu cuerpo te ha fallado
Necesidades para el equilibrio
El consejo más común que se da a las parejas que están tratando de concebir es "relájense”. Tan frustrante que sea este consejo, el autocuidado es muy importante durante este proceso, ya sea que intenten concebir de forma natural o que busquen asistencia en reproducción, subrogación o adopción.
Actividad
Haz una lista de actividades que disfrutes y encuentres relajantes.
Comprométete a realizar al menos una de estas actividades a diario.
Círculo de apoyo
Dicen que se necesita un pueblo para criar a un niño. Lo misma es cierto cuando se trata de concebir un hijo. Este puede ser un momento muy solitario y aislado para las parejas que luchan contra la infertilidad y pérdida, especialmente cuando parece que todas las personas que conocen están embarazadas o ya tienen bebés. Pero al rededor del 13% de todas las parejas tienen dificultades en concebir, así es que no estás sola. Es importante encontrar a compañeras durante este tiempo y conectarte con ellas, por internet o en persona. También es importante compartir lo que está sucediendo en tu vida con tus parientes y amistades cercanas.
Cómo pedir ayuda
"Creo que quiero quedar embarazada, pero tengo miedo. Creo que necesito hablar con alguien."
"Esto realmente me está estresando. Parece que todos en el mundo pueden quedar embarazadas excepto yo. ¿Pueden ayudarme a encontrar a alguien con quien pueda hablar?"
Comprende cuándo necesitas obtener ayuda
Sentirte deprimida o ansiosa mientras intentas concebir se puede manifestar de diferentes maneras, pero estos son los síntomas más comunes:
Sentirte cansada sin razón
Sentirte irritable o enojada
Sentirte culpable, avergonzada o desesperada
Sentirte tan nerviosa que no encuentras la calma
Sentirte desesperanzada
Sentirte inquieta
Sentir que todo es un esfuerzo
Sentirte tan triste que nada te da ánimo
Sentirte inútil
Grandes cambios en apetito: comiendo demasiado o menos de lo regular
Dificultades para concentrarte
Sentirte como que las cosas que te gustaban ya no son interesantes
Sentirte incapaz de sentir anticipación por alguna cosa
El querer culpar a ti misma cuando las cosas van mal
Sentirte asustada o en pánico sin una buena razón
Sentirte tan agobiada que te hace sentir desesperada
llorando casi todo el tiempo, o siéndote como que no puedes parar de llorar
Pensamientos de hacerte daño
Si te sientes deprimida, preocupada o nerviosa durante la mayor parte del día, casi todos los días durante un período de tiempo ...
Si tus síntomas continúan incluso cuando estás haciendo cosas que antes te hacían sentir mejor ...
Si tus síntomas están afectando tu vida, al crear problemas con tu pareja, tu bebé, tu capacidad para cuidar al bebé o hacer tu trabajo ...
... es una buena idea obtener un poco de ayuda. Obtener ayuda es importante para una recuperación rápida y un futuro saludable con tu bebé.
Tomar acción
Si recientemente ha sentido alguno de los otros síntomas en esta lista, hable con su proveedor de atención médica.
Traiga esta lista de verificación con usted.
¿Cómo se mira la ayuda?
Autocuidado: haciendo ajustes en tu vida para reducir el estrés, hacer ejercicio, dormir más, o hacer cambios en tu dieta.
Apoyo entre parejas: hable con amigas y familiares que hayan pasado por la infertilidad y/o pérdida de embarazo. Aprenderás rápidamente que no estás sola.
Grupos de apoyo: son grupos que se reúnen regularmente y son facilitados por un consejero con licencia y / o una compañera con experiencia. Los facilitadores traen temas de conversación y las participantes se van con más información y amistad con otras mujeres que tienen dificultades para concebir y/o que han pasado por pérdidas de embarazo.
Psicoterapia individual: la terapia individual con un psicólogo, trabajador social o terapista es un lugar seguro para compartir todos tus sentimientos y pensamientos sobre la infertilidad y/o pérdida de embarazo.
Medicación: algunas mujeres requieren medicamentos para controlar su depresión y/o ansiedad y después se sienten como ellas mismas nuevamente.
No hay una sola forma correcta. Cada persona tiene tus propias necesidades y circunstancias. Algunas mujeres pueden necesitar toda la ayuda mencionada; otras solo ocupan de un tipo de ayuda. Pregúntale a tu profesional de la salud qué opciones de tratamiento están disponibles y pueden decidir juntos qué pasos deben tomar.
No sufras sola con pensamientos de miedo, ¡obtén ayuda!
Recuerdo ...
Tú no estás sola.
La depresión materna puede afectar a cualquier mujer, independientemente de tu edad, ingresos, cultura o educación.
NO es tu culpa.
No eres una persona débil o mala por sentir esto. Es una condición común y tratable. Hay muchos factores que pueden afectar cómo te sientes, incluido tu historia médica, cómo tu cuerpo procesa ciertas hormonas, el nivel de estrés que estás pasando y cuánta ayuda estás recibiendo. Pero lo que sí sabemos es que esto no es tu culpa.
Con la ayuda adecuada, mejorarás.
Lo más antes que reciba tratamiento y apoyo, mejor. Hay recursos y ayuda disponibles.